los cuerpos que abandonan los lechos
las almohadas, las sábanas y con ellas los besos
las pieles, los cuerpos y el alma.
Y parada ante la ventana que da a la calle
preguntándose cada cual a uno mismo
ya no estás
ya te has ido
ya no te extraño
ni te pienso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Un blog se alimenta de tus comentarios