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viernes, 30 de octubre de 2009

Mojándome, enloqueciéndome


Ya no serás sombra, viento, nada
ya no serás en mi las ganas, el desgarro, el sentimiento,
serás sólo nada, crepúsculo, ocaso.
Te irás perdiendo lentamente
como aquellos que mis manos tocaron y no entendieron nada!
Pero eso, los dos lo sabemos ¿será acaso un lento devenir de horas?
Porque de ves en cuando y en la distancia
asomará tu calor mojándome, enloqueciéndome,
diciendo, gimiendo, susurrando: quieroperdermecontigo,
¡Vamos! piérdete conmigo, vamos!
déjateir,déjateir,abandónate,
quierorevolcarmecontigo,
quiero dejarte sucia de besos y arena y halagos obscenos
para marcarte, para que no me olvides nunca, no me olvides.

jueves, 29 de octubre de 2009

Arañó tu mundo

El amor que se deja cual hoja de otoño llevada por el viento;
el amor que no significó nada para el otro, la otra,
ese amor efímero que arañó tu mundo
que fue frágil y apenas cuando se empezó a gestar lo abandonaste,
ha dejado su temerario sello en tu vida.
Es de advertir que el bajarle la autoestima a una mujer o a un hombre
tiene también su lado diabólico, nefasto
y se inscribe en los registros etéricos del universo.
No hace falta esperar, pues llegará la hora recurrente en que las vas a pagar
y no podrás escapar a la ley irrefutable del destino,
ese que tu mismo creaste con tus emociones y pensamientos.
Amar; es desvivirse sin término,
es esa luz que se difunde bajo el signo de la noche.
Es ese abrazo permanente en la vigilia
que te emociona, te llena y te besa.

martes, 27 de octubre de 2009

¿Qué es el amor?


Equívocamente, el amor carnal, el amor que se toma o se da;
el amor pasional que se toma y se deja; el amor efímero
que nace y muere como si nada; el amor que se tiene por un instante
no tiene nada que ver con el amor real.
Pues el amor sólo se da en un instante profundo, y son pocos quienes lo perciben.
Es la fuerza cohesiva del universo,
es la radiación rosa que baja en el atardecer del planeta,
es la canción del alma escrita con dulzura
y que llena todo tu espacio
para habitar, para vivir. Tal es la belleza del amor.

Era fuego era infierno

Anoche soñé contigo
elemental del fuego; mi salamandra.
¿Qué ofrenda le dabas a la naturaleza que devoraba todo
dejando a su paso destrucción y humo?
Después tus labios contenían la miel que libaste de alguna dama,
vaya uno a saber... ya no lo recuerdo bien.
Sólo mis senos colmando tu boca,
nunca sabré por qué tus labios tocaron los míos;
vaya uno a saber!
Creí por un momento que me dabas una mano
para caminar juntos
una cita, un pasaporte,
que se abría un lugar sobre la tierra de nadie
donde alcanzar tu poderoso infierno.
Loco de amor te acomodaste en mí.
Pensé por un segundo: nadie cupo tan perfecto en mí!.
Yo era la dama transgresora
tu el infierno que me quemaba toda;
pero vaya qué infierno pleno.
Vaya yo a saber a quien amabas
¿qué buscabas?
fui la medusa salvaje que gimió bajo tu azote y tu aliento.
Sabieno que es la hora del cambio recurrente,
y que al lograr el éxtasis
te abrirías llorando incluso de placer
para volver luego a tu imperioso reino de dedos,
piel, velos, sal, fuego y sangre,
al pulpo de tu piel que absorvía y me arrastraba
cual cadencia de arena en el viento.
Pero ya vez no era viento ni arena
era fuego, era infierno
del que gocé y me quemé.

Como el viento

Como el viento que se lleva todo
así te llevaste mis ilusiones.

lunes, 26 de octubre de 2009

Por ti

Por ti inventaría cda día algo nuevo para amarte
me reinventaría para que no te canses nunca,
que no te canses,
que no pierdas en la nada, en la rutina.
Que la noche se encienda con cada caricia,
porque estas manos amor, nacieron para tocarte,
para arder con el fuego que guardas con cuatro llaves
que solo tu y yo sabemos como prenderlo,
porque ninguno antes amor supo cómo
ni cuándo, o dónde hacerlo,
ni cuando mi corazón estaba quieto- callado- amordazado,
sólo cçtu con la palabra precisa- entera- lo acalló.
Y es que antes de ti no vivía,
me abismaba;
abismarse también es morir un poco;
pero después de ti y contigo:
siento amor que vivo.

Para que no digas

Para que no digas que soy loca, poetita,
voy a dejar esta tarde el destino de mi piel a tus caprichos,
voy a correr el riesgo de ser sumisa
y sumergirme en el éxtasis de tu río.
Dejarme llevar por la corriente,
fluir como una barquita caprichosa
navegar y también creer por ejemplo que te amo con locura,
que no existe el tiempo,
trascender más allá de los límites de mi mente concreta,
para que no te sientas solo en esta travesía;
voy a emprender un viaje ligero a las sensaciones,
percibiré tu olor a limonero
y expandiré mias alas hacia el cielo.
Para que te me roces y sienta
la delicia de tu cuerpo en movimiento.
Voya callar los ruidos de la calle que me agobian,
voy a dejar atrás las pesadas maletas de la vida,
voy a hacer mi carga volátil como una pluma
de colores azul, lila y amatista,
voy a volar cerca de tu cuerpo
me asentaré en aquellos sitios no previstos;
en aquellos sitios olvidados de tu cuerpo...
pero mira qué loca! olvidé que prometí que no haría nada
que serías tu fluyendo en mi corriente,
yo dejándome llevar.
Y es que estoy acostumbrada a construir la vida de a dos.
Por eso no me hagas caso, que yo seguiré
cerrando los ojos y abriendo mi mente a lo indecible
a esta cálida oleada de ternura que aparece
cada vez que tu me quieres.

jueves, 22 de octubre de 2009

Sucia de besos y halagos obscenos

Sucia de besos y halagos obscenos
me hundí en la arena para que tú me quieras más;
volví del viaje
y dije las cosas que querías oir.

La muerte es como el viento

La muerte es como el viento que galopa en un caballo,
mírala cómo aferrada a su crin, corre por mi calle;
quiere llevarme.
Oyela com recorre las montañas para llevarme lejos.
Ocúltame en tu pecho, escóndeme en tus brazos por este tiempo solo.
No dejes que me arranque de tu lado.
Escucha cómo trota sobre el pavimento, ahuyéntala amado; quiere llevarme!
llevarme al devachán.
Pero yo, oculta en tu pecho con mi boca aferrada a tu garganta,
con mi cuerpo sobre tu cuerpo
arrimada a tu alma,
dejaré que la muerte pase sin verme fijada.
Y casi imperceptiblemente siento luego tu aliento en mi aliento y tu mano
despeinando mis dolores.
tan cerca mío estas amor amado
que puedo hacer que la muerte pase sin verme fijada.

martes, 20 de octubre de 2009

Vuelve




Estoy sola en la noche y hay lluvia que cae

pesada como piedra que corre como un río sobre el pavimento.

Hay luces encedidas en la gran ciudad con un silencio que duerme.

Estoy viva y sola de tus besos, de tus miedos, de tu ausencia,

de tu cuerpo que era mi puerto- mi mar, eras tú.

Ven! hemos perdido tantos crepúsculos y amaneceres

Ven! quiero el olor de tu cuerpo- quiero revolcarme contigo,

dormir y en tus brazos perderme, confundirme, extasiarme.

Ven! que no te habiten las congojas, las culpas y los miedos

quiero verte desnudo en mi lecho,

voy a cerrarte los ojos y partirte la boca con un beso.

Subiré las colinas de tu cuerpo...

me quedaré ahí y te haré alcanzar el cielo.

Para que no digas que soy loca, poetita,

dejaré que inventes las otras frases con tu silencio, tu mirada

y el cadencioso río de tu cuerpo en movimiento.

Ay! amor de mis amores cuando vuelvas

seré tu amante, me afincaré a tus olas y nos perderemos.

Soy la que te esperea en noches de lluvia,

la que quemó incienso de rosas y jazmines como aromas,

la que te anhela y te desea,

la que quiere hacer contigo

lo que hace el viento con las hojas de otoño!

Su voz




Cuando escucho su voz algo crece aquí en mi pecho,

es como un huracán cuando el me dice: amor amada;

como cuando el viento choca contra las ventanas

como el río que arrasa con todo, llenándolo todo, inundándolo todo.

Es algo incontenible que me asalta, me decanta y enamora.

Cuando escucho su voz, es como una caricia que toca mis pies,

mis muslos y mi vientre, la curvatura de mis tobillos y la pelvis...

Nada es comparable a su voz que me acaricia,

amor amado, puedes dejar de escribir, si quieres

pero no me prives de tu voz, porque entonces muero!

lunes, 19 de octubre de 2009

Voy a partirte la boca con un beso

voy a partirte los labios con un beso
para que sientas que el amor es más que una mirada
y que un beso vale más que una canción.

No me digas

Tocaré si quieres a ciegas tu piel,
pero no me digas que puedo dejar de amarte.

Sudor



Y he sido bañada por el agua que escapa de mi cuerpo,
el líquido que alimenta la sensación del deseo;
la química del deseo y tu cuerpo que me atrapa
me subyuga y me enloquece.

El deseo

El deseo: Es esa sensación no practicada, ha sido malinterpretado, manipulado;
echado a menos. Porque el deseo es sin duda, la sensación más satisfactoria que cualquier ser humano sea hombre o mujer ha sentido.
¿Qué es el deseo?
Es un herizarse de la piel, un sentirse desbocado, alucinado,
trae consigo sensaciones raras pero apacibles;
El deseo es esa substancia química que te envuelve
te roza la piel, te sube como adrenalina
te cambia y te subyuga.

miércoles, 14 de octubre de 2009

pablo neruda

Para mi corazón basta tu pecho,
para tu libertad bastan mis alas.
Pablo Neruda
Es la sangre que nos une y nos derrota.

No marca no mancha

Dejar partir digo egoistamente
ante tanto derrumbe y derrota.
Dejar partir a alguien que no dejó huellas
que no marca, no mancha.

Dejando huella

Como en la arena fui dejando mi huella en cada beso,
en cada piel y en cada alma

Pero el alma no!

Como aves de rapiña se pegaron a mi cuerpo
quise sacármelos y la carne se fue con ellos
pero el alma no.

Todo lo enciendes tú, todo lo enciendes

Foto de Bruno Bisang
Todo lo enciendes tú, todo lo enciendes.
Es como un torbellino cuando él besa mis senos,
cuando siento arder su cuerpo junto al mío.
Y avanzan desmedidas las palabras, las manos, las piernas,
crece su falo cual daga erguida
y los pechos se endurecen;
manos que siguen que marcan al ritmo de mis caderas de fuego
hecha para tus brazos, hecha para tí.
Una mano atrevida que se sube al vértice;
la mía que acaricia y te estremece;
agua corriendo, manos internándose,
agua mojándolas,
aguas chocándolas,
agua que se mete en tus sentidos...
Entonces tu boca bebe,
sacia la sed amado mío- sediento mío
de mis besos, sediento mío de placer...
yo me estremezco, giro, gimo, grito, muero,
me calmo, aletargo el éxtasis ad infinitum.
Es como una gran ola cuando el me besa
cuando siento sus labios subir hasta las lunas,
es algo que se agiganta y acrecienta,
es como un torbellino subiendo, subiendo al cielo
enrroscándose, girando, girando.
No se si tu te lo has preguntado alguna vez,
pero esto es como un viento desatado
que me arrastra y que me aloca,
que me lleva y me sube al cielo
cuando tu estás amado mío a mi lado!

Días que parecen noches

Foto de Phillis Pache
Días que parecen noches;
hombres que parecen murciélagos,
un alma se levanta: sólo sabe amar

lunes, 12 de octubre de 2009

Rozar tu espalda

Rozar tu espalda con mis cabellos
alentada con el aliento y mi boca,
subir lentamente desde el tobillo
la redondezdelosmuslos
lacurvaturadelacinturayascender
supremamentehastaelcuellorespirandodeseo
detucuerpoydetusexoamordetusexo,
diciendo me encanta, me gusta, me enloquece,
sintiendo que te encanta, te gusta, te enloquece,
emprender la travesía y zambullirme en el éxtasis de tu río;
sabiendo que tu pecho me contiene, me retiene en su corriente.
Ven! no te detengas ven!
que no nos agobie el invierno,
quiero la certeza de tu piel repleta de sensaciones,
el ir y venir de mi cuerpo tocándote,
rozando apenas,
tocando los hilos
y un silencio más fogoso que todas las miserias que pululan en el aire;
toda esa miseria que despiden los humanos: romperla, llenarla con amor.
Pasear con esta danza cadenciosa
tejiendo ráfagas, torbellinos
ir y venir de un huracán de fuego,
rozar de frente con mis cabellos,
bajar desde la boca hasta el dorso
y quedarme ahí donde te gusta
y en tu esfigie quedarme danzando
hasta el goce.

El beso

1.
El beso es tocar tus labios con mis labios
es fundirse en un éxtasis supremo.
Es abismarse, cerrar los ojos y volar
hacia la geografía de tu cuerpo.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Doblegarlo

3.
Pero aún así amando con miedo he podido rendirme al amor
y doblegarlo.
Pues existe una realidad y es aquella que errando amorosamente bien
me alimento; es mi sino, mi karma; lo llevo como un estigma atado a mí.
Sin duda amar con miedo tiene sus ventajas
y es que te das cuenta que aquello que no era para tí se va de tu lado
para siempre; y es más fácil porque igual se puede seguir amando
más fuerte, más intenso, más profundo a otro;
porque si algo hay de cierto es que ningún cuerpo es igual al otro;
ninguno ama igual, ni siente, ni piensa igual;
todos son diferentes y hermosos en sus deleites, sus formas de hacer las cosas;
de sentirlas. Por ejemplo yo no se amar de otra manera que no sea con mi cuerpo;
hay otros que lo hacen con sus brazos; sus brazos son como garras que se aferran a tu cuerpo y no se desprenden de ti hasta el amanecer; y eso te produce una ternura suprema.
Los hay aquellos que aman con pasión; pero esa pasión debe ser mútua: atracción y miedo juntas! es el condimento esencial para hacer explotar el universo.
Pero también hay otros que aman con sus manos, sus manos suben, van, vienen, bajan, acarician... y también existen aquellos que aman con ternura; esos son los indispensables.

El abandono

2.
Pero el miedo más dañino, nefasto y absoluto
es el miedo al amor.
Cuando uno piensa en este miedo trata de darle una forma
un cuerpo, un aire, algo. Porque es un miedo poderoso y tenaz que se aferra cual tentáculo a tu alma y no es fácil sacárselo de encima.
Aunque en realidad no habría que sacárselo de encima, sino conocerlo
y aprender a vivir con él.
Cuando pienso en el miedo al amor; pienso indiscutiblemente
en el momento que se pegó a mi como una lacra.
Fue cuando descubrí que ese miedo se respiraba en mi
y se hacía latente cada vez que amaba a alguien.
Talvez nadie lo veía, pero en el etérico se respiraba;
como un fantasma irónico que asomaba cada vez que yo me aferraba a algún cuerpo
para amarlo, besarlo y arrastrarlo por caminos insospechados de amor y ternura.
Siempre él estaba ahí detrás como una sombra, con su sonrisa burlona
espantando a cuanto hombre se me acercaba.
Esa densidad etérica; esa efluvia oscura y tenebrosa
aún espanta a los hombres y no he podido amar de otra manera. No sé amar de otra manera.
Yo sé que esa es sola una forma de ser de mis miedos;
sé que el cuerpo denso que me habita no es sino la oscuridad de mi cuerpo;
y tal cosa se difunde bajo el signo de mi piel.
Y esto es algo que llama a la reflexión.
Este cuerpo mío hecho para todo el fuego, para todo el amor, para toda la ternura
me es ajeno, cerrado, tenebroso, secreto y vedado; este cuerpo, ajeno y temible.
Recién descubierto y presentido.
Es como una sombra:
sólo se deja sentir en lo sobrenatural, en el olor de mi piel, en el sabor de mis besos
en mis sentidos, a veces aparece como un resplandor, o como una alerta
y me deja en una absoluta soledad
es como algo que no me pertenece.
Y sólo se deja sentir con un pálpito, con un dolor que te dice
no te pertenece a ti.
Si algo me asombra, es la imagen del miedo ahuyentando a los hombres en la distancia;
el cuerpo del miedo me preocupa. El miedo al amor y el cuerpo del miedo son cosas que me preocupan sobremanera.
Y yo me pregunto:
¿Cómo hago para librarme de él?
¿Acaso amando sin descontrol
o haciéndome como si no existiera?
Pero ya lo hice muchas veces, nada de eso resultó
y en el fondo se ha sabido sobreponer
a todos las artimañas que inventé para poder amar.
Es por eso que escribo, para ver si un día puede alguien ayudarme a vencer
ese miedo tenaz al abandono.

El miedo al amor

1.
El miedo es ese lugar desconocido y temido. Es un lugar inhóspito y delirante; donde todo lo nefasto se junta: oscuridad absoluta, palpitaciones intensas; negrura, efluvia gris y un derrumbarse por no saber cómo actuar frente a él.
Surrealistamente el miedo no significa nada. El miedo a lo desconocido es nada más un aferrarse a patrones antiguos, un no dejar ir- dejar partir- un temor que te anula y te hiela la sangre.
Acaso un monstruo que no te deja ser vos.
Un ir por la vida temiendo lo peor. Un ser abigarrado que sobrevive viviendo?
El miedo es eso que aleja a los otros de tí.
Yo por ejemplo tenía muchos miedos:
le temía a la muerte; a los hombres y a tí.
Aprendí a montar a caballo por miedo,
aprendí a nadar por miedo,
Aprendí a estudiar por miedo,
aprendí a ser lo que soy por miedo!.
Cuántas infinitas cosas aprendí por miedo.
Pero entonces yo no sabía cómo actuar sin miedo.
Un día cuando el miedo me dijo: soy tu aliado, no me temas;
ese día comprendí que no había que sufrir por miedo.
Pero no se si a todos les pasó igual. Pero al trasponer las mejores etapas de la vida
el miedo te acorrala, te estremece y es como un huracán que te eleva hacia las profundidades
más oscuras y tenebrosas; se vuelve macilenta y a veces viene como un dolor
agudo en la cabeza, o en el estómago; te hace temblar, y vomitar;
te interrumpe en la noche y sasltas de la cama como en pesadilla,
en fin, hay miles formas de miedo.
Pero no hay que temerle. Eso digo insensatamente ante tanto miedo;
si bien los he vencido todos, aún hay uno que me sobrecoge
me encarcela, me aniquila, me abisma:
el miedo al amor!.
Ese miedo; aún no lo puedo superar.
Díme entonces qué hago ante tanto derrumbe y derrota.
Si no puedes amar. Si no has vencido tu miedo al abandono? Cómo puedo yo entonces amar?

Solitariamente

Foto tomada del blog bunda
¿Qué puedo decir de la inmensa soledad, habitando el espacio de mi alma?
Es necesario acaso echar de menos la soledad cuando hay alguien a tu lado?
pero cuando no existe más ese cuerpo imaginado y sentido,
cuando se ha ido; entonces llega el duelo;
porque ya lo dijeron otros el acto del duelo no es sufrir por la pérdida
del objeto amado; sino comprobar un día sobre la piel de la relación
esa menuda mancha llegada allí como el síntoma de una muerte segura;
cuando ese cuerpo no está ya más a tu lado, cuando ya se ha ido.
Y de pronto la noche se hace infinita, se aletarga, se distancia
y es la propia soledad quien te habita;
porque es como si tu te hubieras ido en busca de alguien
de otro cuerpo que te gusta y te da calor
ese calor que no encuentras en el mío.
Entonces la soledad en el espacio que dejaste
ha de ser una soledad muy ancha, muy larga, muy infinita.
Como cuando era una niña y buscaba un sueño intenso,
en aquel cuarto oscuro donde nací a esta vida.

martes, 6 de octubre de 2009

ternura

Si algo extraño es la ternura de tu cuerpo
que al mío se enlaza y no me deja hasta el amanecer.
Si algo quiero es que vengas amor amado...
y me enlaces.

Qué ocultas tu

Cuando pienso en lo maravilloso que es tu cuerpo
pienso en el misterio de tu vida.
Acaso un hombre que amó y lo amaron,
o un vil gusano que se arrastra en el piso;
o un cuerpo perdido en la noche sola.
Un lugar inimaginable
que oculta claves del infierno.

viernes, 2 de octubre de 2009

y siénteme dentro de tu corazón

¿Qué me pasa cuando te abrazo?
nunca nadie se lo ha preguntado,
pero yo tengo la suficiente edad como para hacerlo; como para darme cuenta que un abrazo
es mucho más que una cosa trivial, vacía y efímera.
El abrazo, es algo aún no revelado; acaso un fuego que cruza la piel y se funde;
quizá un lucero encendido y fugaz.
A lo mejor, una cosa profunda que te hace raz en la piel,
o una entidad sutil inimaginable
que vibra a la par que vibro yo.
Cuando pienso en el abrazo, pienso en el misterio de tu cuerpo,
que es la luz que me inunda,
me sobrecoge, y aún en la distancia me habita, me conmueve.
Por eso te pido que me abraces despacio lentamente y sin temor
Abrázame!
y siénteme dentro de tu corazón.
y vibra también como lo hago yo.